Organizada por la Fundación de Estudios Taurinos con el patrocinio de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, este encuentro fue todo un éxito La Fundación de Estudios Taurinos (FET) consiguió en la tarde de ayer su objetivo de unir a las aficiones de España y Francia en un interesante acto celebrado en el Salón de Carteles de la Real Maestranza de Sevilla, patrocinadora del evento. La mesa redonda titulada ‘Los toros en Francia’ supuso un análisis en profundidad y de gran nivel académico sobre la importancia del hecho taurino en Francia, su repercusión mediática y los avances jurídicos que han conseguido dentro de la sociedad francesa. Dirigida por el profesor Francis Wolff, esta mesa redonda contó con la participación de algunos representantes del mundo taurino francés, que ofrecieron a la afición sevillana y al público en general su punto de vista al respecto. Abrió el acto el teniente de Hermano Mayor de la Real Maestranza, Marcelo Maestre León, que explicó que el interés de esta mesa radicaba en conocer “la visión y percepción de los expertos que viven la Tauromaquia fuera de nuestras fronteras”. En nombre de la FET tomó la palabra Fátima Halcón, quien adelantó que esta jornada ofrecía “la oportunidad de conocer la forma de entender la Tauromaquia en las distintas regiones y la defensa que realizaron para su conservación”. Fue el propio Francis Wolff el encargado de introducir este encuentro con una ponencia titulada ‘De la tauromaquia como producto importado (hecho en España) al supuesto “modelo francés’. El conocido filósofo situó históricamente la Fiesta en Francia, que se implantó en 1852, para a continuación hablar de la legalidad de los toros en este país, ya que “la corrida sigue prohibida en Francia pero goza de un estatus curioso”, con amenazas recientes que han hecho que “la afición francesa esté acostumbrada a luchar para defender la Fiesta”. En este sentido explicó que “en España la división es política, mientras que en Francia la fractura es territorial, con el sur que es globalmente taurino y el norte radicalmente anti taurino”. Marco jurídico Fanny Jourdan-Gal y Antoine Capdeville abordaron ‘El estatuto jurídico y la geografía de los toros en Francia’, una interesante ponencia con la que demostraron que la tauromaquia goza de “una posición jurídica singular”, siendo “una excepción en el código penal”. Una protección que tiene sus riesgos dependiendo de tres factores: «de la interpretación de los jueces, del contecto político y de la presión social”. Fanny Jourdan-Gal concluyó esta intervención asegurando que “nuestra fuerza está en nuestra capacidad de movilización”. Antoine Capdeville, por su parte, habló de las dos grandes zonas donde se celebran corridas en Francia: de su historia, los modelos de gestión de las plazas de toros y de la sensibilidad del público de la zona Este y Oeste. Ganaderías Thierry Vignal, actual presidente del Club taurino de París, fue en encargado de abordar la ganadería en Francia con la ponencia titulada ‘Los toros bravos y los toros de Camarga’. Comenzó por situar la cría del toro en la zona de la Camarga y la calificó como ”artesanal” en sus orígenes, destancando la gandería de Yonnet como la más antigua “y primera en presentarse en España”. Con las años, según Vignal, “se ha profesionalizado” la ganadería por un mayor acceso al mercado español, explicando que en la actualidad existen unas 30-40 ganaderías. Al toro de la Camarga lo definió como un animal “casi doméstico” en sus orígenes hasta que a finales del siglo XIX se cruzó con toros y vacas bravas españolas. Vive en estado semi-salvaje y es corrido unas cuatro veces al año durante su prolongada vida en los ruedos, llegando a ser algunos auténticas leyendas. Elvire Oliu, jefa de comunicación de la U.V.T.F. (Unión de las ciudades taurinas francesas) y del Observatorio de las culturas taurinas, abordó la regulación de los toros en Francia. Comenzó por explicar que tanto la Unión de Ciudades como el Observatorio nacen de “la necesidad de unir fuerzas para proteger las tradiciones locales y ejercen un papel clave en la defensa de la Tauromaquia”, dejando claro que una clave para esta defensa es “desligar la Tauromaquia de la confrontación política”, llevándola siempre al terreno cultural. Toreros Por último, Marc Lavie, director de la revista semanal taurina francesa ‘Semana Grande’, se adentró en la historia de los toreros franceses, realizando un completo y brillante repaso de los más relevantes. Lavie destacó que en los años 60 surge una importante generación de toreros en Francia motivada por dos factores: “las ganaderías francesas mejoran y después de la Guerra Civil se exilian españoles y entre ellos toreros que introducen y enseñan la tauromaquia”. Marc Lavie mencionó a los primeros toreros de la historia en Francia y a otros más recientes como Nimeño I, Simón Casas, Jaquito, Richard Millian, Juan Bautista, Sebastián Castella y Clemente, entre otros. Conclusiones Francis Wolff fue el encargado de exponer las Conclusiones de este encuentro. “La corrida en Francia tiene su fuerza y su debilidad”, dijo, situándola como un fenómeno local y territorial que representa el 10 por ciento del territorio francés: “los aficionados estamos contentos con esa delimitación, no queremos extenderla”. También se mostró contrario a la excesiva difusión de la Fiesta en su país: “cuando no se habla estamos contentos”, explicó con cierta ironía. La debilidad la situó en una situación jurídica frágil y sus ventajas en que la corrida de toros es apolítica en Francia y en que las peñas pesan más que las empresas. En cuanto a la afición, el filósofo destacó las virtudes de ser Francia “tierra de acogida para toreros españoles en mala racha” y de su “atención a los tres tercios de la lidia”. Como defectos señaló que el público generalmente “es frío, le falta sensibilidad artística”. |