Tomás Rufo vino, vio y venció en Ciudad Real

  • Puerta Grande para Tomás Rufo en su presentación como matador de toros en Ciudad Real.
  • Juan Ortega y Roca Rey, con menos suerte, se van de vacío, aunque se justificaron con sus respectivos lotes.

Si la tarde de ayer fue espantosa en lo que a temperaturas altas se refiere, la de hoy inició de la misma forma, aunque el tiempo, conocido por ser tan cambiante, nos propuso una tregua que hizo que la tarde se relajara. Tronó y llovió fresquito, alivió y lo agradecimos.

La segunda de abono de Ciudad Real ha registrado un lleno de plaza, con ambientazo en los tendidos en los que se percibía la expectación movida por el cartel anunciador. Y no vino Morante, aún convaleciente de su reciente percance; en su lugar, un matador de toros de la tierra que ha hecho su presentación en este coso. Tomás Rufo junto a Roca Rey y Juan Ortega, que también debutó como matador hoy en la ciudad manchega, han sido los componentes del cartel previsto para el encierro de Victoriano del Río, que, si bien ha presentado una corrida con buena lámina, ha quedado casi sin sabor por el poco juego ofrecido por los astados.

Juan Ortega.-  Nada tuvo de salida el primero de la tarde que no se enceló en la capa del sevillano, saliendo suelto. Inició el trasteo Ortega muy pegado a tablas en una serie marcada por la mesura de sus manos y de lo que el toro le permitió, dejando un trincherazo de cartel para el recuerdo. Complicado el acople con el morlaco que, si bien templado por el pitón derecho, se le quedaba en los tobillos por el poco recorrido que tenía. Por el izquierdo aún fue más complicado encontrar la sintonía, aunque el diestro mostró su superioridad ante las circunstancias. En la suerte suprema Juan pinchó en hueso y de segundas, metió la mano, dejando una estocada entera desprendida. Pitos en el arrastre del toro. Silencio.

El segundo de su lote, fue devuelto por parecer estar lesionado de las manos, sin embargo, el diestro sevillano lo lanceó con lucimiento de salida. Con el sobrero de Virgen María, tampoco Ortega tuvo la suerte esperada. Brusco en sus embestidas, topando en el capote y presentó una notable pérdida de fuerzas tras una puya cuidada. Parecía que quería, pero no podía, el toro perdía las manos constantemente. Desclasado, deslucido, el público lo veía, pero el diestro lo quiso mostrar. Entraba a la muleta a media altura con la cara suelta, y aunque Juan lo cuidó, se salía del muletazo derrotando. Finalizó con estocada tendida. Ovación con saludos.

Roca Rey. –  Recibió el peruano al segundo de la tarde con un rosario de verónicas hasta los medios, otras tantas a pies juntos con remate en media de cartel. El toro mostró fijeza y buena condición de inicio, aunque perdió las manos en un par de ocasiones con facilidad. Se echó Roca Rey el capote a la espalda y dejó un brillante  quite de probatura por saltilleras muy aplaudido. Con las dos rodillas en tierra, el astro peruano volvió a demostrar por qué es  el que manda. Arrojo y valor, se pasó el toro por detrás, por delante y una vez más. Aquello ardió. Cuajó una faena maciza con tandas con la diestra sin tocar tela. El toro fue muy obediente y de gran nobleza. Lo llevó largo en la serie de muletazos para enroscárselo en la cintura, rematando con un pase de pecho sobresaliente. Por el izquierdo también embistió el burel con verdad, acudía al cite franco, aguantándole en algún natural de mucha quietud. Se montó encima ya de nuevo con la derecha en una faena que desde el principio fue exigente. Sin embargo, tras pinchar, dejó una estocada defectuosa que emborronó su gran actuación. Palmas tras petición de oreja.

El quinto de la tarde, el más voluminoso de la corrida, no tuvo nada. Toro sin transmisión que no permitió el toreo de capa del peruano. Toro desfondado, sin opciones por ninguno de los dos pitones, y Andrés lo pulseó en la muleta con esforzado arresto que culminó con pinchazo hondo suficiente para acabar con el insulso de gran tamaño.

Tomás Rufo.-  El toreo del toledano es de poder. Exigencia y mando son sus fuertes. Al tercero de la tarde lo recogió en un aseado recibo capotero. Con la franela y las dos rodillas en tierra, el toro tuvo que meter riñones para obedecer a las exigencias de la poderosa muleta del manchego, metiendo bien la cara. Las siguientes tandas bajaron en la intensidad de la exigencia, que, aunque con el firme mando de Rufo, se volvieron templadas con la diestra. Por el pitón izquierdo, las series fueron más irregulares y el toro se rajó. Con clase, pero con poco fondo, concluyó Tomás con una estocada fulminante. Oreja con petición de la segunda.

No se dejó en el capote del toledano este sexto de la tarde. De nuevo, con una rodilla en tierra, comenzó con mucho mando la faena a este interesante toro que obedeció con atención a la pañosa,  alcanzando los mejores momentos de su intervención con la mano izquierda donde la faena alcanzó grandes cotas. Finalizó con una estocada entera con travesía que hizo rodar al toro sin puntilla. Dos orejas.

FICHA DEL FESTEJO:

Sábado, 17 de agosto de 2025

Plaza de Toros de Ciudad Real

Entrada: Lleno

Se lidiaron toros de la ganadería de ‘Victoriano del Río’, bien presentados y de juego dispar.

Juan Ortega. Silencio y Ovación con saludos.

Roca Rey. – Palmas tras petición de oreja y palmas.

Tomás Rufo. –  Oreja y dos orejas.

Cuadrillas: Gran labor de las cuadrillas en el tercio de banderillas en general. Saludaron, Antonio Chacón en el segundo de la tarde y Viruta en el quinto, acompañados de una labor destacable de Paquito Algaba. Importante calado la de Fernando Sánchez que se desmonteró en ambos toros junto a Andrés Revuelta en el tercero de la tarde.

Incidencias: Sonó el Himno Nacional tras el paseíllo.

Crónica Rocío Molina Pineda, Fotos Carmen de la Mata.