Matador de toros onubense de larga trayectoria pues su debut se produjo en la temporada de 1966 en la Plaza de Las Colonias y su despedida fue en 1984 en la Plaza de La Merced y es uno de los pocos toreros onubenses que han actuado en las tres plazas principales de nuestra ciudad por cuanto, por ejemplo, su alternativa se produjo en la Plaza Monumental.
Su primera aparición pública fue el 27 de marzo de 1966 haciendo el paseíllo junto a Luís Tabuenca, Rafael Romero, Manuel Rodríguez “El Palermo” y Antonio Blanco así como el rejoneador Francisco Jacobo Delgado para lidiar erales de Concepción Candau. Entonces se anunciaba como Paco Torres. Recibió su primero de rodillas en el centro del ruedo y lo lanceó muy ceñido. Con la muleta varios pases por alto para seguir toreando con la mano derecha entre ovaciones para matar de dos pinchazos otro hondo y descabello, siendo ovacionado con fuerza y saludando desde el tercio.
Se ganó la repetición para actuar el 24 de abril con Luís Tabuenca y Rafael Romero y con novillos de Concepción Candau. Torres estuvo muy valiente con sus dos oponentes a los que dominó ampliamente. Como mató bien a su primero le cortó una oreja y en el otro, menos acertado con el estoque, paseó el anillo para agradecer las grandes ovaciones.
El 13 de agosto de 1967 actuó con Manolo (Curro) Vázquez y Luís Arcángel, con erales de Maria Luísa Pérez Domínguez y Pérez de Vargas. Paco Torres realizó una gran faena a su primero al que mató de estocada para cortar los máximos trofeos. En el otro, al dar una larga afarolada de rodillas, fue cogido aparatosamente pero sin consecuencias. Le instrumentó buenos pases a lo largo de la faena que no remató con la espada siendo muy aplaudido. Una semana más tarde hizo el paseíllo al lado de Manolo Vázquez y Santi Ortiz para matar un encierro de Guardiola. Paco Torres realizó una faena a base de ayudados, redondos y naturales a un novillo que achuchó pero el estuvo muy valiente. Mató de una estocada y cortó una oreja. Se superó en el otro en una faena con estatuarios, redondos muy templados y que finalizó de una estocada siendo premiado con las dos orejas y petición de rabo.
La tercera comparecencia de la temporada fue el 24 de septiembre en un mano a mano con Santi Ortiz y novillos de José Rufino Moreno Santamaría que no ayudaron a los jóvenes lidiadores que se vieron imposibilitados de repetir los triunfos de la novillada anterior.
El 19 de mayo de 1968 se encerró como único espada para lidiar novillos de Agustín Pérez Pacheco a beneficio de los Campamentos del Frente de Juventudes. El ganado no ayudó y Paco destacó en el primero al que le hizo una buena faena que le permitió cortar una oreja. En el resto fueron faenas monótonas y muy similares una y otra. En el último sufrió un revolcón que le produjo ligera conmoción cerebral. Con esta actuación se despidió de la Plaza de Las Colonias.
Artículo de Vicente Parra Roldán.
