Artículo de Vicente Parra Roldan
Continuador de la dinastía iniciada por su padre, Manuel García «Venancio», Paco tuvo un espectacular debut ante sus paisanos. Lo hizo el mismo día en el que también actuaba por primera vez Antonio Borrero “Chamaco” y hacia su presentación la ganadería de Diego Garrido Domínguez.
Fueron los tres grandes triunfadores del festejo celebrado el 3 de mayo de 1.953. Completaron el cartel Varelita, Juan Riquelme, José Altamira y el triguereño Rafael Vázquez. Aquella tarde, Paco ganó las mayores ovaciones al lancear de capa a su oponente y con la muleta y en los medios, llevó a cabo una fenomenal faena en la que destacaron las series de naturales. Dejó media estocada en todo lo alto y le fueron concedidos los máximos trofeos.
Este triunfo le sirvió para repetir el 27 de mayo, actuando junto a Chamaco y a Joselito Romero para lidiar erales de Diego Garrido. Su primer oponente le alcanzó en varias ocasiones, afortunadamente sin consecuencias, pero se mantuvo muy sereno, sacando algunos pases interesantes. Tras la estocada fue muy aplaudido. Y en el otro estuvo voluntarioso y con ganas de agradar pero falló con los aceros y todo quedó en una fuerte ovación.
Abrió pronto la campaña de 1.954 pues el 31 de enero participó en un festival junto a Joselito Romero, Rafael Carbonell, Juan Pérez Recio, el que fuera billarista Pepe Gálvez y Manuel Morales “Quitín” con novillos de Fermín Bohórquez que resultaron difíciles. Paco García estuvo solo regular y fue silenciado al acabar su labor.
Volvió a hacer el paseíllo el 27 de mayo actuando junto a Antonio Cobos y Rafael Carbonell ante reses de José Soto de la Fuente. En esta ocasión, Paco no tuvo su tarde y si en el primero sufrió varios revolcones y desarmes y apenas pudo dejar algunos detales, en el otro no estuvo afortunado, especialmente en el manejo de los aceros por lo que recibió los tres avisos.
Cuando parecía que había colgado los trastos, el 29 de junio de 1.958 compareció en el coso onubense, haciendo el paseíllo con Florencio Pérez Recio, Curro Rivas, Ramón Fernández “Regaterín” y Antonio Muñoz “Batalla” para lidiar erales de Gerardo Ortega. Paco demostró sus conocimientos y estuvo bien, dando la vuelta al ruedo para agradecer las ovaciones.
Y esta fue su última actuación en la plaza de su tierra, en la que años después torearía su sobrino Manuel.
