Coso de la Mulata – Plaza de toros de Utrera
Feria de Consolación 2025
Media entrada en tarde agradable.
Toros de Castillejo de Huebra y uno de José Manuel Sánchez corrido en 2° lugar. El quinto fue premiado con la vuelta al ruedo
El Fandi, de verde manzana y oro con remates negros, dos orejas tras aviso y dos orejas y rabo.
Manuel Escribano, de azul Rey y oro, dos orejas y dos orejas y rabo tras aviso.
Curro Duran, de verde esperanza y oro, ovación tras aviso y oreja.
Utrera, que es la cuna del toro bravo, anunciaba por su Feria de la Virgen Consolación -la del barquito en la mano- un sólo festejo taurino para los consumados matadores El Fandi y Manuel Escribano y el torero local Curro Durán.
Se había conformado un muy buen presentado encierro de 5 toros de la ganadería de origen murubeño de Castillejo de Huebra con un toro de Manuel Sánchez, segundo hierro de la ganadería titular.
En los muros del Santuario, hay un mármol con unas letras de José María Pemán, que entre otros versos destaca con “Utrera tiene que tiene…”
Así, hoy Utrera tiene un coso, el de La Mulata que después de muchos avatares vino a sustituir al antiguo coso del Arrecife, un coso este de La Mulata que está junto al recinto ferial y que convive con la zona de atracciones y una de ellas, La Cárcel sobrepasa en estos días la altura del tendido de sol.
Utrera siempre ha tenido muy buenos aficionados y de su vinculación con el toro de manera popular no sólo dan muestras las castas fundamentales, Vistahermosa, Cabrera y Vázquez, sino los exvotos relacionados con la tauromaquia que hay en la sala de exvostos del Santuario, pero eso es otra historia.
Utrera hoy ha tenido un público festivo y jovial, en la que recordamos como la mejor entrada de la plaza de toros multiusos desde su inauguración, así la tarde fue generosa en premios, cortándose once trofeos que podrían haber sido más, si Curro Durán no se hubiera atascado con la espada y el verduguillo ante sus oponentes.
El Fandi recibió a su primer toro con cuatro largas cambiadas en el tercio, estando variado con el capote. Compartió banderillas en este toro con Escribano. Aunque el toro acusó cierta querencia a tablas, embestía por momentos con cierta clase. Lo mató de una estocada baja y un descabello cortando el torero granadino dos orejas.
El mismo premio cortó Escribano ante su primer oponente, en el que también compartió banderillas con Fandi, este toro del segundo hierro de la casa, fue más soso en su embestida, pero Escribano le sacó más partido matándolo de una estocada desprendida.
Curro Durán en su primero dejó muestras de su toreo, basado en el clasicismo y la suavidad ante un toro al que le pegaron fuerte en su encuentro con el caballo. Brindo su oponente a Paco Ojeda y tras una estocada atravesada, el mal uso del verduguillo le privaron de cortar una oreja con fuerza, saludando desde el tercio.
Con una faena de cara a la galería el Fandi se metió al público en el bolsillo desde el recibo de capote, espectacular con las banderillas, trenzó una faena con su más amplio repertorio, matando en la puerta de chiqueros y cortando los máximos trofeos.
Escribano ante el quinto toreó con mucho gusto al natural, en los que quizás fueron los momentos de más calidad de la larga tarde en el coso de La Mulata. Cierto sector del público pidió exageradamente el indulto para este toro, que de haberse concedido hubiera desmerecido la memoria del indulto de Tahonero de Miura por parte del torero de Gerena en esta misma plaza. Tras un pinchazo y una estocada, se le concedieron los máximos trofeos a Escribano y se le dio la vuelta al ruedo al toro.
El sexto, un toro que fue protestado durante los primeros tercios, evidenció la falta de contratos de Curro Durán y por ende su actitud ante su oponente. Tras dos pinchazos, dejó la mejor estocada de la tarde, que ya era noche cerrada en Utrera bajo la luz de la luna.
Mientras los triunfadores de la tarde salían por la puerta grande del coso de la Mulata, los usuarios de La Cárcel usaban sus móviles desde las alturas, mientras alguien nos hablaba con nostalgia de aquel coso utrerano del Arrecife del que solo queda el solar y las ventanas de unas taquillas.
Utrera tiene que tiene…y aunque quizás cualquier tiempo pasado fuera mejor, quien tuvo siempre retuvo y quizás para los anales queden los naturales profundos de Escribano y la mejor entrada en el nuevo coso, siempre por Consolación.
Crónica de José Luis Trujillo del Real
















