Dos orejas para el onubense en el que cerraba plaza, oreja por coleta para Joselillo y Tendero en una corrida con complicaciones.
Menos expectación levantó la corrida de Cuadri en este año en los tendidos de la plaza de toros de Cortegana, que se antojan cortos para la gran entrada que hubo en el pasado año, con llenazo de no hay billetes. Desigual juego de la corrida, con un gran toro que cerró plaza, el resto, con opciones, aunque sin llegar a redondear nada. Mención especial merece el banderillero Tornay, que se echó la tarde a la espalda en el segundo tercio. Muy meritorio lo que hizo el hombre de plata sevillano, que pareó a los seis toros con arrojo, exponiendo una barbaridad, ya que es consabida la dificultad de los toros de Cuadri en el tercio de banderillas. Saludó en cuarto y quinto, incluso en éste escuchó la música, en una tarde completa del banderillero.
El sexto fue un toro bajo y bien hecho. Embistió con profundidad y codicia en el saludo capotero a la verónica de Alejandro Conquero. Dos series importantes por la mano derecha, con el toro embistiendo con emoción. A partir de ahí, la faena bajó un punto, con el toro más parado y el torero sin encontrar el sitio para el cite. Una estocada de efecto fulminante hace que le concedan las dos orejas. Este fue el punto álgido en cuanto al apartado ganadero. El tercero de la tarde, tras propinar una fuerte cornada al banderillero, resultó un toro con poca clase en la muleta, sin humillación y soltando la cara. Lo pasó por ambos pitones el onubense, en un trasteo sin lucimiento.
El primero de la tarde fue un toro enclasado pero sin motor. Noble, pero alejado de lo que uno espera de la legendaria ganadería de Cuadri. Joselillo fundamentó la faena en el pitón derecho, pero sin resultar ligada la faena ante la falta de acometividad del toro. Una media estocada de buena colocación atrona al toro, y se le concede la oreja. Su segundo oponente fue el que ofreció menos posibilidades de la tarde. Toro duro y de embestida áspera, sin pasar y soltando gañafones. Faena afanosa del torero vallisoletano, sin lucimiento. Además no estuvo certero con los aceros, especialmente con el verduguillo, siendo silenciada su actuación.
El segundo de la tarde le correspondió en suerte a Miguel Tendero, y fue un toro con clase y nobleza en los engaños, sin estar sobrado de acometividad. Una serie por el pitón izquierdo de gran clase fue lo más reseñable de un trasteo en el que no hubo entendimiento entre los contendientes, con un toro con mayores opciones de lucimiento. Cuatro pinchazo y descabello anularon cualquier petición de trofeo. El quinto obedeció a los engaños, aunque con menos clase. Trasteó sin trascendencia de Tendero, de mucha cantidad de muletazos y poca calidad. Se le concede la oreja generosísima.
Crónica de Carlos Arroyo Fotografía de portada Antonio del Carmen.
Plaza de toros de Cortegana, con tres cuartos de entrada en los tendidos, se lidiaron toros de Cuadri, de excelente presentación, de juego desigual, complicados y de excelente juego el último de la tarde, para los diestros:
Joselillo, oreja y silencio
Miguel Tendero, ovación y oreja
Alejandro Conquero, ovación y dos orejas
Incidencias.- Al parear el tercero, resultó cogido el banderillero Miguel Ángel de las Heras, que fue atendido de una cornada de 15 centímetros en el triángulo de Scarpa que pela la vena femoral, siendo trasladado al Hospital de Riotinto con pronóstico grave. Se desmonteró Tornay tras parear cuarto y quinto.
