Toreros de ayer: José Leandro Múñoz «Pirfo».

Continuador de una saga iniciada por su tío abuelo Gregorio, conocido como “Mellaíto de Málaga”, continuada por su tío Manuel, un excelente peón, y seguida por su padre Francisco, novillero, José Leandro Muñoz tenía que ser torero y a ello dedicó su juventud y en ello puso sus ilusiones.

La primera oportunidad en su tierra le legó en una nocturna celebrada el 22 de julio de 1.939., haciendo el paseíllo junto a Frijones II, Francisco Infante, Antonio Rodríguez “Joroco”, Rafael Fariñas y Cándido Pérez Campos. Pirfo no estaba anunciado pero entró en sustitución de Julián Suárez “El Mirlo”. En los chiqueros, erales de José María Lancha. Pepe cumplió con el capote antes de buenos muletazos para no estar bien con la espada.

Este triunfo le sirvió para repetir el 5 de agosto con Joroco, Manuel Vega “Gitanillo de Triana” y El Caena con reses de José María Lancha. En esta ocasión, Pirfo mostró poseer mucho valor, veroniqueó muy decidido aunque se mostró verde en la colocación, realizando una buena faena dando algunos pases aceptables, cosa que no hizo con la espada, siendo muy aplaudido.

Volvió a actuar el 20 de agosto, acompañado de Melli II y El Mirlo y reses de Lancha. Pirfo entró sustituyendo a Joroco. Lucido con el capote en sus dos enemigos, a los que muleteó muy cerca y con lucimiento pero, una vez más, estuvo desafortunado con el estoque, siendo muy ovacionado.

Tras un largo paréntesis volvió a su plaza el 1 de marzo de 1.945 actuando con Manuel Jiménez “Chicuelo” y Ángel Gómez García, con reses de José Carvajal y Gerardo Ortiz. De nuevo, brillante actuación tanto con el capote como con la muleta de Pepe Pirfo pero, una vez más, no estuvo afortunado con la espada, siendo fuertemente ovacionado por los espectadores.

Volvió a actuar ante sus paisanos el 10 de marzo de 1.946 en un mano a mano con Manuel Gómez “Carnicerito” ante reses de José de la Cruz. Buena actuación en su primero al que mató de una estocada en buen sitio y un descabello, siendo ovacionado. En el otro, mejoró su quehacer y, tras un pinchazo y una estocada, paseó el ruedo para agradecer las ovaciones.

El 21 de abril actuó en un festival con Diego Gómez “Laine” y Manuel Roig “Niño de la Isla” con ganado del Conde de la Maza. Pirfo estuvo muy valiente pero no logró redondear faena, escuchando muchas palmas-

Nueva actuación en Huelva. Fue el 8 de septiembre en la parte seria del espectáculo Los Calderones. Redondeó una buena actuación que se saldó con una vuelta al ruedo en su primero y una oreja en el otro.

Tras esta actuación, Pepe Pirfo cambió el oro por la plata, triunfando como un excelente banderillero. Ello no le impidió que el 17 de marzo de 1.963 junto a Niño de la Isla y Joselito Romero participase en un festival a beneficio de dos viejas glorias del toreo onubense. Se lidiaron reses de Cuadri, Gerardo Ortega y Diego Garrido. Pepe se lució con el capote y banderillas e invitó a su hijo Paco a dar unos capotazos y unos muletazos que sorprendieron a los tendidos que premiaron con los máximos trofeos, pata incluida, a los Pirfos.

Todavía Pepe haría un paseíllo más en Huelva. Fue en la Monumental el 26 de noviembre de 1.973 en un festival junto a Niño de la Isla, Pepe Gallardo, Emilio Silvera, Joselito Romero y su hijo Paco, con reses de Litri, Prieto de la Cal y Guardiola. Pepe Pirfo se lució en un gran tercio de banderillas antes de llevar a cabo una torera faena de muleta lena de sabor que le valió para cortar una oreja. Estas fueron las actuaciones de este torero choquero en su tierra, donde fue admirado en todos los aspectos. La ciudad, agradecida, le dedicó una calle en la nueva zona de Pescadería y, durante muchos años, ejerció la asesoría artística en la plaza de toros de La Merced.

Artículo de opinión de Vicente Parra Roldán.

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