Miguel quiso despedirse de la plaza de Las Colonias que, 66 años antes había inaugurado su padre Miguel Báez Quintero, el primer Litri de la historia. Y lo hizo actuando en dos festivales. El primero se celebró el 4 de febrero y contó con las actuaciones del rejoneador Fermín Bohórquez, Manolo Vázquez, Miguel Mateo “Miguelín”, Curro Romero, Manuel Cano “El Pireo” y Santi Ortiz con reses de Pilar Herráiz. No tuvo fortuna Miguel y le cupo en suerte un novillo flojísimo con el que no se pudo lucir siendo ovacionado. Un poco después, el 10 de marzo otro festival con las intervenciones del rejoneador Conde de San Remy y Juan Barranco Posada, Antonio “Chamaco”, José Manuel Inchausti “Tinín” y Juan Carlos Beca Belmonte con reses de distintas ganaderías. Miguel lidió un excelente novillo de Cuadri, premiado con la vuelta al ruedo y que obtuvo el trofeo al ganadero triunfador y le cortó las orejas y el rabo.
El 2 de agosto llegó la inauguración de la Monumental Plaza de Toros y, como había hecho antes su padre, Miguel estuvo en ese cartel junto a Manuel Benítez “El Cordobés” y Ángel Teruel, con toros de Celestino Cuadri en el que abrió plaza realizó una artística faena entre la admiración de los espectadores que le agradecieron haber vuelto para esta efeméride, siendo premiado con las dos orejas. En el otro realizó otra buena faena muy cerca de su oponente, pero no estuvo acertado a la hora de matar y la ovación del público le obligó a dar la vuelta al ruedo. Al día siguiente y con ganado de Clemente Tassara actuó junto a Paco Camino y Palomo Linares. De nuevo cautivó a los espectadores con el toro que abrió plaza al que le realizó una gran faena con alardes temerarios cortando dos merecidas orejas. En el otro que pareció toreado y que se rompió el pitón izquierdo, Miguel se limitó a prepararlo para la muerte dejando media estocada y, muy disgustado se metió en el callejón. Como cierre de campaña el 20 de octubre participó en un festival junto a Julio Aparicio, Juan Posada, “Chamaco”, Jaime Ostos, Paco Camino, Sebastián Borrero “Chamaco II” y Gabriel Puerta con reses de Carlos Urquijo. Miguel recordó sus mejores tiempos, con un toreo emocionante, metido en los cuernos de su enemigo y mostrando su valor. Mató de estocada y obtuvo las dos orejas.
Volvió a la plaza el 8 de diciembre de 1969 en un festival en el que participaron el rejoneador Antonio Ignacio Vargas, Paco Camino, Miguel Márquez, Manuel Benítez “El Cordobés”, José Fuentes y Manolo Cortés. Estaba anunciado también Santi Ortiz, pero su novillo fue utilizado como sobrero del cuarto por lo que se quedó sin torear. Miguel veroniqueo con temple al novillo Albayda y comenzó con estatuarios citando a más de treinta metros y aguantando impávido la envestida. El triunfo lo tenía en sus manos, pero falló con los aceros siendo muy ovacionado.
Artículo de Vicente Parra Roldán.
